Los conocedores de las historias de piratas cuentan cuales son las diferencias entre piratas, corsos, bucaneros y filibusteros. De todas ellas, pienso que los bucaneros son quienes más definen el comportamiento de las denominadas agencias de cualificación. Los movimientos de S&P y Moody’s vuelven a poner en un brete la economía de algunos países.La S&P amenza en boicotear el acuerdo dela UniónEuropeapara salvar la economía griega y Moody’s vuelve a cargar contra el euro dudando sobre la solvencia de la economía portuguesa.
Estas agencias encarnan lo peor del sistema capitalista hoy. Este es una caricatura de la idea original basada en la creación de valor por parte de quienes emprenden una iniciativa empresarial. Las agencias de cualificación son un poder al margen de los poderes democráticos de la sociedad. La democracia, tal como la hemos conocido se ha transformado y sufre una importante crisis de legitimidad. Porqué, si bien sirve para organizar el sistema político, éste presenta importantes limitaciones para poder controlar nuevas fuentes de poder, entre las cuales se encuentra el poder económico y financiero global. Mientras los emprendedores, base de la legitimidad capitalista, están paralizados por falta de créditos; existe un poder financiero especulador que ahoga a las empresas y a la soberanía de los países. Hoy, gracias al comportamiento de las agencias, la ciudadanía ha descubierto la debilidad de la política. Es urgente volver a situar a la política en el centro de las relaciones humanas. De lo contrario, los bucaneros seguirán campando a sus anchas y abrirán el camino para que los corsarios hagan el agosto.